No pudo ser. La candidatura encabezada por Alfredo Carreño para renovar el compromiso del PSOE-Oviedo no consiguió la mayoría necesaria para ganar la votación que esta tarde tuvo lugar en el Auditorio de Oviedo.
No puedo ser imparcial, puesto que yo mismo formaba parte de su candidatura, con el convencimiento de que era la que más y mejor representaba al conjunto de nuestra Agrupación.
A él y a otras cuantas personas de esa candidatura les agradezco personalmente el gran afecto con el que me trataron durante sus años como Comisión Ejecutiva y que contaran conmigo pensando que podía aportar algo a este partido. Gracias.
Finalmente, ha sido Wenceslao López el elegido como nuevo secretario general de los y las socialistas ovetenses. A él y a su Ejecutiva le queda por delante una muy dura tarea. Lo que urge ahora es que la división de la votación (sólo hubo cuatro votos de diferencia) no se prolongue en el tiempo más allá de esta noche. Esa tarea no es sólo suya, sino de toda la militancia; con lealtad y compromiso deberemos cumplirla.
Ahora, más que nunca, el proyecto socialista necesita de toda nuestra buena fe, capacidad, pensamiento y esfuerzo. Pongámonos a ello.